El Presidente del Comité de Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. insta a la Administración a mantener a las familias juntas

U.S. Bishops’ Migration Chairman Urges Administration to Keep Families Together 


Washington — The Department of Homeland Security has recently acknowledged implementation of the policy of separating families arriving at the U.S./Mexico Border. Most Reverend Joe S. Vásquez, Bishop of Austin and Chairman of the U.S. Conference of Catholic Bishops’ (USCCB) Committee on Migration, issued the following statement in response:

“Forcibly separating children from their mothers and fathers is ineffective to the goals of deterrence and safety and contrary to our Catholic values. Family unity is a cornerstone of our American immigration system and a foundational element of Catholic teaching. ‘Children are a gift from the Lord, the fruit of the womb, a reward.’ (Psalm 127:3) Children are not instruments of deterrence but a blessing from God.
Rupturing the bond between parent and child causes scientifically-proven trauma that often leads to irreparable emotional scarring. Accordingly, children should always be placed in the least restrictive setting: a safe, family environment, ideally with their own families.
My brother bishops and I understand the need for the security of our borders and country, but separating arriving families at the U.S./Mexico border does not allay security concerns. Children and families will continue to take the enormous risks of migration—including family separation—because the root causes of migration from the Northern Triangle remain: community or state-sanctioned violence, gang recruitment, poverty, and a lack of educational opportunity. Any policies should address these factors first as we seek to repair our broken immigration system.”

USCCB - Español

El Presidente del Comité de Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. insta a la Administración a mantener a las familias juntas


1 de junio de 2018 
WASHINGTON— El Departamento de Seguridad Nacional implementó recientemente la política de separación de las familias que llegan a la frontera entre México y Estados Unidos. El Reverendísimo Joe S. Vásquez, Obispo de Austin y Presidente del Comité de Migración de la Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. (USCCB) emitió en respuesta el siguiente comunicado:
“La separación forzosa de niños de sus madres y padres es inefectiva para los objetivos de disuasión y seguridad y contraria a nuestros valores católicos. La unidad familiar es una piedra angular de nuestro sistema de inmigración estadounidense y un elemento fundamental de la enseñanza católica. ‘Los niños son un regalo del Señor, el fruto del útero, una recompensa’ (Salmo 127: 3). Los niños no son instrumentos de disuasión, sino una bendición de Dios.
Romper el vínculo entre padres e hijos provoca un trauma científicamente demostrado que a menudo conduce a cicatrices emocionales irreparables. En consecuencia, los niños siempre deben ubicarse en el entorno menos restrictivo: un entorno seguro y familiar, idealmente con sus propias familias.
Mis hermanos obispos y yo entendemos la necesidad la seguridad de asegurar nuestras fronteras y nuestro país, pero la separación de las familias que llegan a la frontera de Estados Unidos y México no alivia las preocupaciones sobre seguridad. Los niños y las familias continuarán asumiendo los enormes riesgos de la migración, incluida la separación familiar, porque las causas raíces de la migración en el Triángulo Norte siguen siendo: violencia comunitaria o sancionada por el estado, reclutamiento de pandillas, pobreza y falta de oportunidades educativas. Cualquier política deben abordar estos factores primero a medida que tratamos de reparar nuestro roto sistema de inmigración”.