Claribel Alegría, la poeta que volvió con la Revolución y nunca más se fue

El 17 de mayo de 2017, Claribel Alegría fue galardonada con el XXVI Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, el reconocimiento más importante de poesía en habla hispana.
Clara Isabel Alegría Vides nació el 12 de mayo de 1924 en el departamento de Estelí, Nicaragua. Sus padres fueron el nicaragüense Daniel Alegría Rodríguez y la salvadoreña Ana María Vides. Ellos se casaron en 1923. La joven pareja se vino a vivir a Estelí. Nueve meses después, en una casa esquinera en el centro de Estelí, nació la primera hija del matrimonio: Clara Isabel. De cinco hermanos, fue la única que nació en Nicaragua.
Vivió sus primeros años en la ciudad de Santa Ana, en el occidente de El Salvador, donde estudió primaria y secundaria. En vacaciones, visitaba Nicaragua con su padre, quien siempre le reafirmó sus raíces nicaragüenses.
Claribel se fue a estudiar a Estados Unidos en 1943. Se graduó en Filosofía y Letras en la Universidad George Washington en Washington D. C. En el país norteamericano, conoció al amor de su vida, con quien compartió sus días, tristezas y alegrías: el escritor y diplomático estadounidense Darwin J. Flakoll. La familia Alegría Flakoll procreó 4 hijos. Debido al trabajo de Flakoll como diplomático, Claribel pudo viajar y conocer el mundo.
Volvió a Nicaragua con la revolución
La caída de Anastasio Somoza Debayle en julio de 1979 los agarró en Mallorca, España. Claribel volvió a la tierra de su padre, por primera vez, desde que era niña. Se quedó varios meses en el país y, junto con su esposo, publicó el libro NICARAGUA: la revolución sandinista (historia-testimonio 1982).
Claribel no se volvió a ir de Nicaragua. Los primeros años de la Revolución trabajó de cerca con el Frente Sandinista de Liberación Nacional. Escribió, promovió la cultura y recibió en su casa a escritores importantes, entre ellos, Julio Cortázar, quien era su amigo. No obstante, como la mayoría de intelectuales que lucharon y promovieron la Revolución, Claribel terminó defraudada.
En una de sus últimas entrevistas a La Prensa luego de recibir el Premio Sofía, se refirió al silencio de las autoridades nicaragüenses: «No me importa que no me hayan felicitado. Yo he sido muy directa. Este Gobierno no me gusta. Yo los veo como a una pareja dictatorial. Muy al principio (del regreso de Ortega al poder en 2007), yo me esperaba otra cosa».
Una obra extensa y una vida intensa
La obra de Alegría es extensa e incluye poesía, novela y cuento. Su primer poemario Anillo de silencio fue publicado en México en 1948. Sus poemarios abarcan más de 40 títulos. Claribel Alegría en el país de la realidad, publicado en 2012, fue su última obra. Claribel, como escritora, no se apartó de la realidad de su tiempo. En sus textos, hay denuncia social, reivindicaciones de los derechos de las personas y mucha rebeldía con tintes antiliterarios que le dan más valor a su obra.
Junto con su esposo Flakoll, Claribel escribió 16 libros, entre los que se destacaron Somoza, expediente (1993) y Death of Somoza (1996). Alegría y Flakoll, también, tradujeron varios libros al inglés, entre ellos, el ensayo de Carlos Fonseca Viva Sandino, publicado en 1985. Asimismo, tradujeron la poesía de Robert Graves y de otros autores anglosajones.
Reconocimientos y premios
La obra de Claribel obtuvo más de veinte reconocimientos y menciones internacionales, como el Premio de Poesía Casa de las Américas, Cuba (1978) por el poemario Sobrevivo. En 1997, la Unión de Artistas y Escritores de El Salvador le otorgó una placa y un diploma de honor. En 1998, recibió el doctorado honoris causa por parte de la Universidad de Eastern Connecticut. En 2004, el Gobierno de Francia le entregó la Orden de las Artes y las Letras.
En 2010, reconocieron su obra durante el VII Festival Internacional de Poesía, de Granada. Es la primera escritora a quien le dedican el festival literario más importante de Centroamérica, en el que participan más de 100 poetas de 57 países.
Y la «cereza sobre el pastel» —como ella dijo— la recibió en mayo de 2017 con el XXVI Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, concedido por la Universidad de Salamanca y el Patrimonio Nacional de España. Con este premio, se reconoce el conjunto de la obra de un autor vivo que, por su valor literario, constituye una aportación relevante al patrimonio cultural común de Iberoamérica y España.
En el cielo ya hay alegría
La narradora y ensayista es una de las personalidades más reconocidas y destacadas de la literatura nicaragüense. Falleció la mañana de este 25 de enero en Managua. Sus familiares informaron que la reina de la poesía será velada hoy en Sierras de paz y sus funerales se realizarán el 27 de enero en las Sierritas.
(Abixael Mogollón, www.articulo66.com)