PAKISTAN, Rawalpindi (Agencia Fides) – Perplejidad y terror en la comunidad cristiana de Rawalpindi, una ciudad que se extiende en el área metropolitana de la capital Islamabad. Los fieles están todavía en estado de shock por el episodio ocurrido durante la noche del 29 de diciembre, cuando una sala de adoración cristiana protestante fue incendiada.
Según el pastor Qamar Zaman, encargado de la sala y del cuidado pastoral de la comunidad afectada, “se trata de un acto de intimidación para sembrar el terror y crear enemistades entre cristianos y musulmanes”. El incendio, dice, ha sido provocado sin ninguna duda, ya que “no había ningún problema con el suministro de electricidad”. Según la policía, que está investigando, los autores pueden haber querido enviar una señal de odio y venganza personal contra el Pastor, a pesar de que el hombre no ha recibido amenazas previas.El abogado cristiano Sardar Mushtaq Gill dice a Fides: “La condición actual de los cristianos en Pakistán está sufriendo de un sentimiento de desconfianza y temor. Los extremistas siguen sembrando el terror entre los ciudadanos y no tienen ningún respeto ni hacia las personas ni hacia los lugares santos. Quieren romper la armonía entre las religiones en Pakistán y crear disturbios en el país. Nuestra respuesta sólo puede ser una respuesta de fe y oración”. (PA) (Agencia Fides 12/1/2015)